Fertilizantes caseros: abonos orgánicos para tu huerto urbano
Crear tus propios abonos es barato, sostenible y perfecto para espacios pequeños. Aquí tienes recetas y pasos claros para empezar:
1) Compost básico: mezcla restos verdes (cáscaras, recortes de cocina) y marrones (cartón, hojas secas) en proporción ~2:1. Airea cada semana y mantén húmedo como una esponja. En 2–3 meses tendrás compost listo.
2) Té de compost: coloca 1 parte de compost en 5–10 partes de agua, deja reposar 24–48 h removiendo ocasionalmente. Cuela y diluye 1:5 antes de aplicar al suelo o como fertilizante foliar.
3) Vermicompost en balcón: usa una caja ventilada con lombrices, añade restos vegetales y algo de tierra. Cada 2–3 meses recoge humus oscuro y un lixiviado que se diluye 1:10 para regar.
4) Abonos rápidos y caseros: cáscaras de plátano troceadas enterradas o en infusión (potasio); posos de café mezclados con la tierra (nitrógeno) en pequeñas cantidades; cáscaras de huevo lavadas, horneadas y trituradas para calcio.
Consejos prácticos: evita carne y lácteos en el compost, no uses aceites o sales, realiza aplicaciones líquidas diluidas y prueba en una planta antes de generalizar.
Pistas de manejo: usa cubos o macetas viejas para compostar, tapa para evitar moscas y rota materiales para airear.
¿Te animas a probar estas recetas en tu huerto urbano? Hazlo este fin de semana y comparte tu foto o experiencia en los comentarios.
#FertilizantesCaseros #AbonosOrgánicos #HuertoUrbano #Sostenibilidad #CultivaEnCasa 